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  • Él, quien tenía un nombre tan bonito…

    Él, quien tenía un nombre tan bonito…   “Voy a escribir sobre vos”, le digo, mientras mi mejilla izquierda descansa sobre su rodilla y él juguetea con mi cabello suelto. “Ok”, escucho su voz. “Pero no pongás mi nombre. No quiero ser un personaje pequeño en una novela grande”. Una pena, porque él tiene un nombre…

  • Vos, quien pintarás los amaneceres

    Vos, quien pintarás los amaneceres   A Martina, quien tal vez no se acuerde de este personaje, pero que es tan suyo como su sangre.   Dicen que no hay nadie que no entre en tu vida justo en el momento indicado con una misión indicada. Yo creo en eso. Yo creo que vos, Gemma,…

  • Puerta Brandeburgo

    De cómo aprendí a hablar alemán

    De cómo aprendí a hablar alemán   Me gusta el alemán. Sí, ya sé: es raro. Me gusta más escuchar a un hombre alemán decir algo tan random como einunddreißig que a un italiano susurrarme al oído ciao, bella. Me encanta ver esas palabras kilométricas, como si no hubiera suficientes letras para expresar todo lo…

  • Stonehenge: por qué deberías ir aunque te digan que no vale la pena

    Stonehenge: por qué deberías ir aunque te digan que no vale la pena   Ese día descubrí que era bruta. Brutísima. Imbécilmente bruta. Estúpidamente bruta. Mentecatamente bruta. En fin, valga decir que, junto con el día en que me compré unas botas góticas de plataforma indomable por la módica suma de cien dólares, y aquel…

  • Cosas que se quedaron en el tintero

    Cosas que se quedaron en el tintero   El mejor beso   Es la madrugada, pero el sol se resiste a salir con temprana desgana primaveral. Estamos sentados en el sofá, azul oscuro como el cielo que queda más allá de la ventana. Fumamos pausadamente. Aún tenemos en los labios el sabor del vino. Aún…